La integración que consigue esta piscina con el mar, se consigue con el color escogido de la mezcla de mosaicos, que da un verde turquesa al mediodía. En la noche, por la iluminación led, este espejo de agua cambia su colorido según el gusto del cliente. Una banca que da hacia el infinity, permite gozar del paisaje en el día y experimentar una emoción indescriptible por las noches, al observar las estrellas.
El área de la piscina, tanto la seca como la húmeda, es extremadamente limpia en cuanto a diseño, solo está enmarcada por tres palmeras, de las cuales dos de ellas enmarcan el infinity. El jacuzzi, en uno de los extremos, cierra el complejo.